Reflexión

Las cosas, tanto buenas como malas, siempre nos pasan por algo.

Por nuestra infancia, por nuestros padres, por nuestro entorno, por nuestros amigos o enemigos, por nuestra vida con sus movimientos desbordantes, sus ilusiones, miedos y ocurrencias… ,por nuestras parejas, por nuestros soles y nuestras noches, por nuestras ausencias, por nuestros hijos, por nuestros recuerdos y desamores, por nuestras tempestades…

Pero, al final de cuentas, uno es responsable de la manera en que decide tomar o hacerle frente a esas cosas que nos pasan, uno es el único y exclusivo responsable de su propia existencia, convirtiéndose en quien es, en quien decide ser… mas allá de todas aquellas cosas que nos pasan o no nos pasan.

La Ley de Atracción describe el milagroso proceso gracias al que creamos nuestra propia realidad.




*Por Javier Abrigo influenciado por Marc Levy

El voto femenino

Desde fines del siglo XIX las mujeres argentinas venían luchando por la obtención de sus derechos cívicos. 

En 1907, Alicia Moreau de Justo creó el Comité Pro-Sufragio Femenino. Este, sumado a otros impulsos influyeron para que en mayo de 1910, Buenos Aires fuera elegida como sede del Primer Congreso Femenino Internacional con la participación de delegadas chilenas, uruguayas y paraguayas donde se reclamó enérgicamente el derecho de las mujeres a votar. 

Otra de las pioneras fue Julieta Lanteri quien en1919 lanzó su candidatura a diputada nacional por la Unión Feminista Nacional y contó con el apoyo de Alicia Moreau de Justo y Elvira Rawson.