Argentina vivió numerosas crisis durante toda su historia, lo que generó la creencia popular de que "vivimos en crisis", Ante esta afirmación cabe preguntarnos si sirve o es trascedente, que nos ubiquemos en tiempo y espacio, para individualizar, dentro de este excepcional contexto, de que que tipo de crisis estamos hablando: Económica, política, sanitaria, cultura o social.
No se puede ocultar que Argentina forma parte de una realidad universal, pero su precaria y endeble situación política, económica y social (la que parece carecer de temporalidad) hizo que el golpe sea mucho mas fuerte y cause mayores daños (que no parecen terminar de rebotar).
La realidad nos muestra la imposibilidad del gobierno de turno en reestablecer la potestad soberana del Estado para impulsar un desarrollo sostenible e incluyente, que permita redistribuir las riquezas de manera equitativa, justa y legítima, para dar a este proceso de crisis, un sustento (al menos que se insinúe) económico, político y social.